COL – REPOLLO Y SUS BENEFICIOS

  

HISTORIA

Col o Repollo tiene una larga historia de uso como alimento y medicina. Fue desarrollado a partir de la col silvestre, un vegetal que estaba más cerca en apariencia a las acelgas y col rizada desde que se compone de hojas que no formaban una cabeza.  

Se cree que la col silvestre fue traída a Europa alrededor del año 600 aC por grupos de nómadas celtas. Se cultiva en las civilizaciones griegas y romanas antiguas que mantenían en alta estima como una panacea general, capaz de tratar una serie de condiciones de salud.  

El cultivo de la col – repollo se extendió por el norte de Europa en Alemania, Polonia y Rusia, donde se convirtió en un vegetal muy popular en las culturas alimentarias locales. Los italianos se acreditan con el desarrollo de la col rizada. Rusia, Polonia, China y Japón son algunos de los principales productores de repollo hoy.

 

Chucrut, un plato a base de col fermentada, tiene un legado colorido. Marineros holandeses lo consumieron durante los viajes de exploración prolongados para prevenir el escorbuto. Los primeros colonos alemanes introdujeron la col y las recetas tradicionales del chucrut en los Estados Unidos.  

ACERCA

La col – repollo es una verdura de hoja de la familia Brassica, redonda u ovalada, que consiste en hojas interiores de luz verde o blanquecinas suaves cubiertas con hojas exteriores más duras y verdes oscuros. Es ampliamente utilizado en todo el mundo, comen cocidas o crudas como ensalada y es un vegetal muy popular.

 

PERFIL NUTRICIONAL

La col – repollo es una excelente fuente de vitamina K y vitamina C. También es una muy buena fuente de fibra, manganeso, y ácido fólico. La col es también una buena fuente de molibdeno, vitamina B6, potasio, tiamina (vitamina B1), y calcio.  

BENEFICIOS PARA LA SALUD DE LA COL

Los beneficios para la salud de la col incluyen el tratamiento de estreñimiento, úlceras de estómago, dolor de cabeza, exceso de peso, trastornos de la piel, eczema, ictericia, escorbuto, reumatismo, artritis, gota, trastornos oculares, las enfermedades cardíacas, el envejecimiento y la enfermedad de Alzheimer.

 

OTROS BENEFICIOS

Col, que es rico en yodo, ayuda en el buen funcionamiento del cerebro y el sistema nervioso, además de mantener las glándulas endocrinas en buen estado. Por lo tanto, es bueno para el cerebro y el tratamiento de trastornos neuróticos como la enfermedad de Alzheimer. Los diversos otros nutrientes presentes en la col tales como la vitamina-E que mantiene la piel, los ojos y el cabello sano, calcio, magnesio, potasio, etc., son muy útiles para la salud general. La col – repollo también se puede utilizar para el tratamiento de venas varicosas, úlceras de pierna, úlceras pépticas y duodenales etc.  

CÓMO SELECCIONAR Y ALMACENAR

Elija cabezas de col – repollo que son firmes y densas con brillantes, nítidas y coloridas hojas libres de grietas, magulladuras y manchas. El daño severo a las hojas exteriores es sugestiva de daño gusano o deterioro que puedan residir en el núcleo interno también.

 

Debe haber sólo unas pocas hojas sueltas exteriores unidas a la madre. Si no, puede ser una indicación de la textura y el sabor indeseable. Evitar la compra de la col de precorte, ya sea reducido a la mitad o en tiras, ya que una vez la col se corta, se comienza a perder su valioso contenido de vitamina C.  

Manteniendo frío el col – repollo lo mantendrá fresco y ayudar a retener su contenido de vitamina C. Ponga toda la cabeza en una bolsa de plástico en el cajón de su refrigerador. El col – repollo rojo y verde se mantendrá así durante unas 2 semanas.

 

Si necesita almacenar una cabeza parcial de la col, cúbralo bien con papel plástico y refrigere. Dado que el contenido de vitamina C de la col comienza a degradarse rápidamente una vez que se ha cortado, se debe utilizar el resto dentro de dos días.  

CONSEJOS PARA PREPARAR Y COCINAR

A pesar de que el interior de la col es generalmente limpio ya que las hojas exteriores protegen, es posible que usted desee limpiarlo. Quite las hojas exteriores gruesas fibrosas y cortar el repollo en trozos y luego lavar con agua corriente.

 

Si usted nota cualquier señal de gusanos o insectos, que a veces aparece en la col, remojar la cabeza en el agua con una cuchara de bicarbonato de sodio durante 15-20 minutos. Para preservar su contenido de vitamina C, cortar y lavar la col justo antes de cocinar o comer.  Desde que los fitonutrientes en la col reaccionan con el acero al carbono y convierten las hojas negro, use un cuchillo de acero inoxidable para cortar.  

Para cortar el repollo en trozos más pequeños, primer trimestre y quitar el núcleo. Col se puede cortar en rodajas de espesor variable, ralladas con la mano o triturados en un procesador de alimentos.

 

Es importante recordar que podemos permitir que las enzimas mirosinasa en el repollo para hacer su trabajo natural por corte, trituración, o cortar la col cruda y dejar reposar durante 5 a 10 minutos antes de cocinar. Una vez que las células en la col se han descompuesto a través rebanado, desmenuzado o picado, las enzimas mirosinasa en esas células pueden llegar a ser activo en la conversión de los glucosinolatos en col en isotiocianatos (ITC), que es beneficioso para nuestra salud.  

CÓMO DISFRUTAR

• Repollo minuciosamente limpiado se puede comer crudo, de hecho, es muy sabroso y nutritivo.
• Combine col roja y verde rallada con jugo fresco de limón, aceite de oliva y condimentos como la cúrcuma, el comino, el cilantro y la pimienta negro para hacer ensalada de col con un toque indio.
• Úselo en un sofrito vegetariana con cebolla, ajo, pimientos y chiles verdes y mezclarlo con el arroz al vapor.
• Se hace una gran sopa con diversos ingredientes que le gustan.
• Hojas rebanados o rallados crudas se añaden a las preparaciones de ensalada de verduras.
• Hojas de col frescas o conservadas en vinagre se usan como rollos, en el llenado, que se basan generalmente en la carne o las verduras picadas en muchas partes de Europa central, los Balcanes, y las regiones de Asia. 

NOTA

La col puede contener «bociógenos,» algunos compuestos derivados de las plantas, especialmente encuentran en las verduras crucíferas como la coliflor, el brócoli, etc.